Notas
Las modificaciones realizadas en la NC Babieca han salvado no solo el laboratorio, sino a los mineros que estaban en el sistema. Una honrosa gesta que tiene, me temo, un sacrificio porque devolver la nave a su estado original implicará trabajo, un astillero y algunos días en dique seco revisando los motores subespaciales después del sobreesfuerzo realizado. ¿O quizás alguien quiera saltar al subespacio sin comprobarlos? Afortunadamente, la estación orbital de Rahmi ofrece alternativas de ocio para sus visitantes y, quién sabe, quizás podáis utilizar la pinaza para conocer el mundo helado del que hablan las canciones de Lua Madison.
Partida
La llegada a la estación
Salimos del subespacio muy lejos del planeta (tal y como estaba la nave no nos la queríamos jugar), y llegamos a la estación espacial. La nave estaba para darle un repaso serio, el viaje con el laboratorio soldado a la nave es algo que no deberíamos repetir.
- Estación. Nos felicitan por el trabajo realizado.
- Ministra de comercio del planeta (P. Sanchez). Nos felicita por el trabajo y es una suerte que seamos amigos del planeta Rami. Se va a acercar a vernos.
- Jefe coordinador de la disani. Nos indica una ruta de aproximación. Se acerca a vernos.
La nave no cabe en la dársena por lo que tenemos que hacer los trasbordos de los mineros y nuestros con la pinaza. Mientras irán desacoplando los añadidos y recuperando la estructura habitual de nuestra nave.
Desembarcamos de la nave dejando allí al abogado y al hacker, y tras un pasillo de aplausos con el que nos recibieron (por lo visto todos habían leído el periódico) y unas felicitaciones de Zacarias, nos dirigimos hacia el bar.
Camino al bar nos encontramos con Yin Dare, quien nos hizo firmar un contrato de confidencialidad
En el panel de la casa de sushi nos avisaron que se acercaba una nave desde el planeta, y al enfocar con la cámara, Fox se percató de que algo grande estaba detrás, no se veían las estrellas en un espacio muy grande.
Salió una nave de la estación y por los altavoces (alguien lo había pirateado) oíamos las conversaciones, la estación estaba cerrada y nadie podía entrar, ni siquiera la Ministra de Comercio. La cosa estaba tensa, incluso se sacaron las armas de la estación y alguna interceptora hizo algún disparo de advertencia.
Los compadres del bar no estaban contentos con lo que sucedía, incluso comentaron que “El cabrón de Parow se estaba pasando”. Parow era el jefe de la estación, puesto por la Cámara de Comercio.
Momentos después comenzó a iluminarse la sombra que había detrás, era un crucero de batalla armado hasta los dientes, en ese momento se guardaron las armas de la estación y los interceptores volvieron a base al comprobar que claramente los papeles estaban en regla.
La gente estaba muy a favor de esta actuación de la Ministra, estaba claro que no eran muy simpatizantes de la Cámara de Comercio.
Poco después del atraque nos reunimos con la Ministra de Comercio, con P.Sánchez. Parecía una mujer de lo más majo, estábamos seguros que ganaría las próximas elecciones de calle, aunque Fox no compartía nuestras sensaciones, el comentario sobre poner un pie en Lariput no le cuadraba. Patrana defendía que para las políticas que tenían programadas para Rami, el planeta necesitaba ingresos externos al planeta, de ahí Lariput, donde había una estación minera.
Podía ser que Sanchez tuviera en mente solicitar al Senado que Lariput y su sistema fueran una colonia de Rami. Por lo que sabemos el haber hecho misiones humanitarias en el sistema hace ganar “puntos” a la hora de solicitar que sea colonia.
¿Había sido todo un montaje para el proyecto de la Ministra? Pues lo que si era un montaje era la visita de la Ministra para felicitarnos, nos había utilizado de excusa para entrar en la estación y dar un golpe de estado.
Azul – CorporacionesVerde – Planerta | Gris – En evoluciónAmarillo – Hay que ir a verlo |
El punto amarillo resultó ser una nueva parte, la mafia local, que aún no se había decidido por ninguna opción. Nos llevaron hasta su líder, Garak Dum (un veddio), al que le preguntamos si trabajaban para Mia Murtel y la respuesta fue “todos trabajamos para Mia Murtel”.
Ya sabíamos que era la zona amarilla así que fuimos a la zona residencial, allí nos encontramos con Susan, quien nos dijo que nos llevaría a hablar con Carala Burdon (una humana), estaba convencida de que éramos simpatizantes de su causa. Carala era una humana que parecía una hippy escapada de Woodstock, no le faltaba nada, ni el gato, ni las flores en el pelo, ni las plantas cultivadas con luz artificial que no eran exclusivamente para decoración.
En el puente estaba Sila Parow, nos felicita en su nombre, el de la estación y el de la Corporación. Nos comenta lo contentos que están todos con nuestra misión, y lo claro que tienen que nos tendrán en cuenta para sus siguientes movimientos y transportes.
De ahí nos fuimos al laboratorio B1, donde nos entrevistamos con Kalen Sil (un cromter). Se habían trasladado a la base dos semanas antes con idea de estar cerca de las rutas comerciales. Le ofrecemos nuestra nave para realizar transportes, pero el no estar registrados nos limitaba ya que no podíamos comerciar en la ruta Talamir, por lo que no podrían traer sus piedras preciosas de Yu
Finalmente los miembros de la nave llegamos a un acuerdo, defenderemos la posición del planeta pero tratando de que el control administrativo de la estación quede en nuestras manos. Y como si hubiéramos inventado la rueda, nos fuimos a hablar con Zacarías a plantearle la propuesta, vendiendole la moto de que él sería el mejor candidato a dirigir la estación.
Una propuesta similar le hicimos a la Ministra. Adoptamos la posición de neutrales necesarios para su victoria, es más, le ofrecemos un abogado
Nos dividimos los objetivos.
- La planta técnica no es importante,
- El nivel de almacenes solo es importante el almacén 21, donde está el puente secundario, puente del que la jefa de la estación desconoce su existencia, lo construyeron sin que lo supieran.
- En el nivel de dársenas no hay que preocuparse porque lo más fácil es que se unan, el problema son los piratas, a los que considera un cáncer.
- La planta residencial sería un plus, pero igual no vale la pena.
- En la planta de ingeniería son importantes los motores.
Nos dirigimos al almacén 21, allí hablamos con Marcos Aro y sus dos hermanos, los estibadores que controlan el sector, a cambio de mejoras laborales les tratamos de convencer de que nos apoyen contra las corporaciones y misteriosamente lo conseguimos.
La estación empezaba a derivar hacia nuestro bando, la cosa iba bien, ahora tocaban los motores, quien controla los motores controla la nave. La recepción fue un poco complicada, ni un solo humano y lo que había allí parecía bastante especista. Conseguimos llegar hasta su líder, Maro Dolar, pero no éramos los primeros en llegar, allí estaba Garak Dum, quien con una sonrisa que te daba ganas de arrancarle las alas y lanzarlo por una esclusa, nos dijo que llegábamos tarde ¿pero tarde a qué? Un discurso especista que mejor no publicaremos aquí, hace que pase a nuestro control.