El equipo parte de la estación Garado, pero su nave queda atrapada en una nube de polvo espacial. Encuentran la nave Hail Mary y la ayudan a repararla. La capitana Ceballa les pide que recuperen datos en una estación orbital y exploran opciones para unirse a una cofradía.

Fecha: 2023-02-19

Reparto:

• Juan Carlos (DJ)
• Scott (Twelk)
• Lohengrin (Landel)
• Sento (Antolin)
• Juan (Fox Xander)
• Leo (Morki)

Notas

Capítulo

Partiendo de Garado

ーAquí, estación Garado, tiene la ruta despejada NC Babieca, buen viaje.

La aceleración de la nave os pega a vuestro asientos mientras vuestro hábil piloto hace mínimas correcciones a las trayectorias. Cuando saltáis al subespacio, solo él permanece consciente y tras unas horas en esa realidad, vuelve a la realidad del universo conocido. Los sensores están ciegos, de momento, pero la nave se agita como si algo la hubiera agarrado en mitad de su vuelo. El movimiento es tan grave que el piloto activa el protocolo de despertar urgente, unas inyecciones de vuestros lechos hacen que recuperéis la consciencia casi de inmediato, pero, eso sí, dentro de unas horas dolerá la resaca. Aún no habéis recuperado del todo los sentidos, pero notáis los últimos estremecimientos de la nave espacial. Como saltar en una cama elástica de lado. Saltan algunas alarmas menores, pero nada grave. Afortunadamente, la nave está recién reparada.

Frente a vosotros, aunque acercándose a gran velocidad (la vuestra), hay una débil estrella. El espectrómetro la clasifica como clase F, pero su brillo desmiente esa afirmación porque casi no se la puede ver y a esa distancia debería eclipsar cualquier cosa en las proximidades. Además, su brillo, no parece estable, parece como si palpitara de forma irregular.

De repente, una llamada de auxilio llena los altavoces internos de la Babieca, no es vuestra…

Un camino accidentado

Sobre lo que nos avanzábamos a una velocidad superior a la que nos hubiera gustado era una nube de polvo oscuro, una onda de choque, parecía que algo había explotado y nos dirigíamos contra su onda expansiva.

Una nave con dos motores en extensores de popa parece navegar a la deriva rodeada de pequeños fragmentos de sí misma. No parece que pierda soporte vital y, tras una inspección con más detenimiento, no parece haber nada grave. Y sin embargo, la nave está varada en el espacio, con tan solo los motores de maniobra. Se trata de una clase Colimba VII, unas naves comerciales destinadas a pequeños fletes y transportes de pasajeros.

La nave que emitía la llamada de emergencia era la Hail Mary, una nave de lujo de transporte de pasajeros. Su capitana era Ceballa, una mujer de piel muy clara (pocos soles había visto sin protección), y de trato muy agradable. Algo había chocado contra su nave y entre otras cosas había roto el buje, no permitiendo el salto al subespacio dejándolos allí varados.

Venían de Yusje y se dirigían a Yusje 7 a recoger datos, una estación orbital que se encontraba en medio de la explosión.

La Hail Mary

Twelk pasó a la Hail Mary para tratar de repararla, la tripulación tenía algunos miembros un tanto extraños, como Asensio el tecno, que más bien parecía un Immo, era un tipo enorme con manos proporcionales a su cuerpo que hacían que te plantearas como podía reparar cualquier cosa con unas manos parecían un manojo de porras. O Flio, quien miraba a Twerk como si hubiera matado a su perro.

Twerk localizó la avería y teníamos recambio en nuestra nave así  que los ayudamos en la reparación. Flio, quien acompañó a Twerk en todo momento, se extrañó de que no estuviéramos afiliados a ningún sindicato, ellos sí lo estaban, el suyo era un sindicato independiente con un logotipo que era como una especie de chispa y un dos.

Al comentar Twerk que estábamos buscando trabajar de forma legal en la ruta Thalamir Ceballa se ofreció a presentarnos alguien del sindicato, así que nos dijo que cuando llegáramos a Yusje la buscáramos en el Tres Saltos, o nos esperaría ella en la plataforma. Como era de esperar estas cosas siempre tienen un precio, y el de este favor era que entráramos a la estación orbital y que recuperáramos los datos que habían venido ellos a buscar, que tal y como tenían la nave no podían entrar.

Yaske 7

Contactamos con Yaske 7 y Víctor, un jional, nos dijo que podíamos acceder, que no había asteroides que contra lo que habría chocado la Hail Mary habría sido un celatán que por allí vagaba.

Nos dirigimos hacia la estación orbital trazando una ruta que evitara al zelatan, aunque este no estaba interesado en que lo evitáramos, no paró de dirigirnos hacia nosotros aunque cambiáramos de rumbo, solo cuando la estación orbital disparó hacia el vacío cerca del celatán, éste se lanzó a perseguir el disparo, momento en que aprovechamos para entrar en la estación.

Hubo algún problema con el pago por no estar sindicados, pero asumiendo nosotros la responsabilidad del acto con un formulario B14, nos entregaron un modium con el importe, los códigos de desbloqueo nos los darían al entregar la mercancía en Yusje.

Ya pensábamos irnos cuando nos avisaron de la explosión de la estrella en 60 segundos, era mejor que pusiéramos nuestra nave a resguardo detrás de la estación y la utilizáramos como escudo. También nos invitaron a ver la explosión.

La estrella explota

La estrella explota, una masa de polvo negro sale despedido hacia la estación, todos se vuelven locos haciéndo cálculos, se oyen gritos de “lo tenemos, lo tenemos”. El único que no parecía contento era el celatán, que se lanzó contra la estrella atacándola.

El celatán atacaba la estrella cuando se llenaba de energía, tras la explosión la nube de polvo no permitía ver la estrella por lo que el celatán se relajaba.

En la estación había una ukara que rompió algún corazón en la tripulación, pero aún así partimos, y partimos con un espíritu que no parecía el nuestro, pensábamos salvar al celatán haciendo de cebo, y lo conseguimos por poco, estábamos ya casi en su boca cuando el celatán vio las estrellas por fin.

Hacia Yusje

Nos dirigimos a Calere, donde había una estación orbital gigantesca con naves por todas partes, se notaba que ya estábamos en la ruta Thalamir. Entre las naves había naves de la 6 flota de la RFP, algo que nunca habíamos visto.

Explicamos que estamos haciendo un porte para la capitana Ceballa, que no estamos sindicados y nos dan acceso a la estación al cabo de un buen rato en una especie de agujero, y además gracias.

Tras pagar las tasas salimos a la plataforma y vemos a la capitana Ceballa, aunque estaba rodeada por dos tipos que la estaban molestando, además Fox se percata de que hay un humano que nos está vigilando.

Ceballa estaba siendo amenaza por dos miembros de un sindicato rival que desaparecieron al vernos, aunque no muy satisfechos. Ceballa nos descodifica el modium y nos invita a unas cervezas en su local favorito, el Tres Saltos.

Buscando cofradía

Ceballa nos cuenta opciones para sindicarse, corporación o cofradía de comercio, la corporación te da más seguridad pero te limita la libertad, la cofradía de comercio te da menos seguridad pero más libertad.

La opción que más nos convence es Millar, así que nos dirigimos a su sede local. Creíamos que todo iba a ser coser y cantar pero no fue así, no tenían referencias nuestras y no querían contratar a unos desconocidos, lo cual era normal, tendríamos que esperar un día más para que las verificara.

Había que pasar un día en la estación, así que buscamos algún antro en el que matar las horas, acabamos en el Agujero Negro

Cuando volvimos nos esperaban con los brazos abiertos, nuestras referencias eran sorprendentemente buenas, pero cuando íbamos a firmar el representante no nos inspiró demasiada confianza y al consultar en tripadvisor las opciones vimos que opinaban mucho mejor sobre Chispa Dos, así que pensamos que sería mejor explorar otras opciones.

Los de Chispa Dos parecían mucho más “personas”, más comprometidos con los cófrades y con prácticamente las mismas ventajas.